Thomas Andrew Dorsey 1899-1993

Si hubiese que escoger tan sólo a 3 personas realmente relevantes en la historia del Góspel, sin ninguna duda Thomas Dorsey estaría en todas las quinielas. Y hablo de 3 y no solamente de una, porque si así lo hiciera habría quienes preferirían escoger a la mujer que supo interpretar magistralmente las obras de Dorsey, y de quien hablaremos próximamente: Mahalia Jackson.

Dorsey nació en el estado de Georgia en una familia campesina. Su padre también era pastor de la iglesia local donde, como es un patrón que nos encontraremos en infinidad de ocasiones, Thomas comenzó a hacer sus pinitos musicales. Siendo él un niño, sus padres se trasladaron a Atlanta, donde Thomas no encontró su lugar, comenzó a perder el ritmo de la escuela, y la terminó abandonando con tan sólo 12 años, para comenzar a trabajar como pianista en clubes nocturnos de jazz y blues, y en espectáculos de vodevil.

En 1919, a la edad de 20 años, se traslada a Chicago, donde descubre un nuevo mundo de ritmos y estilos musicales siempre dentro del blues y el jazz. Pero sufre un ataque de nervios y decide dejar la música durante 2 años, durante los que experimenta la revelación de que su lugar debe estar en la música religiosa. Sin embargo, sus primeras composiciones son rechazadas por sonar excesivamente a blues y jazz, músicas profanas poco adecuadas para la celebración religiosa. Esto significaba que Dorsey no podría ganarse la vida en la música religiosa, por lo que volvió temporalmente al blues

Mientras asistía a la convención baptista de 1930, descubrió que una cantante (Willie Mae Ford Smith) interpretó una canción suya: "If You See My Savior" con tal éxito, que tuvo que repetir la interpretación en 2 ocasiones más. Ni corto ni perezoso, Dorsey consiguió imprimir 4.000 copias de la partitura que se vendieron prácticamente solas. Gracias a este éxito consiguió encadenar contratos para dirigir el coro de varias iglesias, garantizándole la seguridad económica necesaria para dedicar todo su tiempo a la música góspel.

No contento con tener ya un papel relevante en el mundo del Góspel de Chicago, impulsó la creación de Convención Nacional de Coros Góspel (NCGCC), agrupando a los directores de todos los coros de iglesias baptistas en los EEUU, y celebrando una convención anual donde compartir canciones y experiencias religiosas, y en las que los autores, como él mismo, pudieran genera importantes ingresos gracias a la venta de partituras. Este es un asunto importante. Antes de Dorsey (o él mismo en sus inicios) los compositores debían acudir "a puerta fría" a intentar vender sus obras, sin el menor respaldo, y sin conocer si la oferta llegaría a encontrarse con la demanda. Dorsey creó una estructura de negocio de editores de partituras (la Dorsey House of Music) que sirviera como plaza de mercado en la que la oferta y la demanda pudieran encontrarse sin equívocos, garantizando el acceso a las mejoras obras para los coros, y los ingresos para los autores. Este avance desarrolló de forma extraordinaria la creatividad de lo que se llamó la Edad de Oro del Góspel, y que abarcó las décadas entre 1930 y 1965. 

Su obra más reconocida, que abre este artículo, es "Take my hand, precious Lord", y tiene una historia trágica. En 1932 Dorsey se encontraba felízmente casado con Nettie Harper y a la espera inminente del nacimiento de su primogénito. Sin embargo, tenía que cumplir con los compromisos de un contrato para organizar un coro en San Louis, Missouri. Pero al llegar al hotel encontró un telegrama en que le informaban que su mujer había sufrido graves complicaciones en el parto y debía volver. Cuando llegó se encontró que su esposa había fallecido, y su hijo moría igualmente dos días después. Dorsey reaccionó encerrándose en soledad durante 3 días. Al salir, se sentó en el piano, y la canción que brotó de sus manos y su voz fue esta:

INGLÉS Precious Lord, take my hand Lead me on, let me stand I am tired, I am weak, I am worn Through the storm, through the night Lead me on to the light Take my hand precious Lord, lead me home. When my way grows drear Precious Lord linger near When my light is almost gone Hear my cry, hear my call Hold my hand lest I fall Take my hand precious Lord, lead me home. When the darkness appears and the night draws near And the day is past and gone At the river I stand Guide my feet, hold my hand Take my hand precious Lord, lead me home.

ESPAÑOL Precioso Señor, llévame de la mano Dirige mis pasos, ayúdame a levantarme Estoy cansado, débil y gastado A través de la tormenta y de la noche Llévame hacia la Luz Tomame de la mano, precioso Señor, y llévame a Casa. Cuando mi camino se vuelva oscuro precioso Señor, mantente cerca Cuando la luz me haya abandonado Escucha mi llanto y mi llamada Sujeta mi mano para que no caiga Tomame de la mano, precioso Señor, y llévame a Casa. Cuando la oscuridad aparece y la noche se acerca Y el día ya se ha pasado Me levanto en medio del río Guía mis pasos, sujeta mi mano Tomame de la mano, precioso Señor, y llévame a Casa.

Thomas Dorsey es conocido como el Padre de la Música Góspel por 3 razones de las que ya hemos hablado:

• Sus composiciones: más de 400 canciones góspel, aparte de un par de miles composiciones profanas.
• Su dedicación a la construcción y educación de los coros, por medio de la NGCCS.
• Su labor como impulsor del negocio de la publicación y edición de partituras para la difusión de loas nuevs creaciones.

Pero hay una cuarta labor que le hizo ganarse ese título en los corazones y la memoria de todos los amantes de la música góspel, y es que fue el gran mecenas de una generación de músicos y cantantes que dieron una brillantez extraordinaria a esa Edad de Oro del Góspel de la que hemos hablado (y seguiremos mencionando). Por supuesto la incomparable Mahalia Jackson, pero también: Sallie Martin, la mencionada Willie Mae Ford Smith, James Cleveland (que merece sobradamente su propia entrada en este blog), Roberta Martin, Dinah Washington (gran artista de música profana que comenzó en las Sallie Martin Singers), Sam Cooke (de quien también hablaremos), Magnolia Lewis, Theodore R. Frye, Eugene Smith, Albertina Walker y muchos más.

Sus obras más famosas, aparte de "Take my hand, precious Lord" son "It's A Highway To Heaven", "Peace In The Valley" o "The Lord Will Make A Way Somehow".

Como dice su biografía en la página web de la NCGCC, Thomas Andrew Dorsey experimentó la transición a la Gloria el 23 de enero de 1993. Y tenemos la enorme suerte de que su legado le sobrevive.