Creo que ya he mencionado en ningún momento anterior que formo parte del Coro Góspel de la Escuela de Música de Boadilla del Monte (Madrid, España). Somos un coro a 4 voces encabezado por la gran directora Beatriz Alvarez Deiros.
En alguna ocasiones me he encontrado con personas que utilizan el argumento de que nuestro modo de cantar no es "Góspel de verdad", porque utiliza técnicas corales clásicas. Según esas personas el "Góspel de verdad" es lo que se ve cuando la agencia turística te lleva a una iglesia de Harlem en Nueva York, y escuchas muchos aleluyas, y ves a la gente mover mucho los brazos... No es que eso no sea Góspel (ya hablaremos del movimiento pentecostal). Pero el verdadero Góspel, el de verdad de la buena, comenzó con un coro polifónico.
Como ya he contado con anterioridad, durante la esclavitud, la población esclava no tenía permitido ni siquiera aprender a leer ni escribir. Con el final de la guerra civil de los EEUU y la liberación de los esclavos, algunos benefactores entendieron que el progreso de esta población debía pasar por su educación. Especialmente urgente era formar maestros que enseñaran las habilidades básicas (leer, escribir, sumar, restar...) al resto de antiguos esclavos. Y tanto para ellos, como para quienes pudieran progresar en estudios superiores de cualquier ámbito, se crearon universidades pensadas específicamente para negros.
La primera de ellas fue la Fisk University (1866), en Nashville, Tennessee. En el año 1871 las donaciones sobre las que sustentaba su actividad comenzaron a decaer, y el comité de dirección de la universidad tuvo que estudiar qué medidas podían realizar para incentivarlas si no querían someter su actividad a recortes.
Casualmente, el tesorero de la institución, George Leonard White, resultaba ser también el director del coro, y propuso la organización de una gira con la intención de recaudar fondos. Aunque existían dudas de que la recaudación -que debía ser mediante donación voluntaria, es decir, sin cobrar entradas- superase los gastos de desplazamiento, manutención y alojamiento, la idea despertó un gran entusiasmo, especialmente entre los miembros del coro, y se procedió a organizarla para realizarla ese mismo año. Y como quien se pone ante un público necesita tener un nombre, se les otorgó el nombre de la institución, más el del edificio de la misma donde realizaban sus ensayos: Fisk Jubilee Singers |
De esta manera, el 6 de octubre de 1871, 10 cantantes, una pianista y 2 profesores partieron hacia Cincinnati, donde realizaron actuaciones los 2 siguientes días. A pesar de sus necesidades, al conocer que un gran fuego había asolado la ciudad de Chicago, decidieron entregar los algo menos de 50 dólares recaudados para socorrer a las víctimas.
La primera gira duró 18 meses y recorrió numerosos estados del norte de los EEUU. Aunque la recaudación comenzó siendo algo pobre, el público se fue animando y llegaron a recaudar para su universidad en torno a los 40.000$, muy por encima de lo esperado. Fue tal el impacto que este coro generó a su paso por los EEUU que el mismo presidente del país, el General Ulysses S. Grant, les invitó a cantar en la Casa Blanca.
Dos nuevas giras sucedieron a la primera, demostrando la admiración que el público norteamericano comenzó a sentir por el Espiritual Negro y las excelentes interpretaciones que realizaba este coro, formado por antiguos esclavos e hijos de esclavos. No sorprenderá decir que los estados del sur demostraron ser mucho menos rentables económicamente, principalmente por la profunda crisis que sucedió a la guerra civil. Pero no pudieron quejarse en cuanto a la cantidad de público asistente, ya que generalmente las salas e iglesias donde realizaban sus actuaciones se encontraban repletas.
En 1873 decidieron saltar el océano para actuar en el Reino Unido, después de que algunos amigos del coro, entre ellos el escritor Mark Twain, les aconsejaran ampliar la aventura. Después de actuar delante de reina Victoria, lo que inicialmente se planeó como un tour por Gran Bretaña hubo de extenderse, a petición de las casas reales de esos países, por Holanda y Alemania, donde actuaron delante de la nobleza. Sobra decir que el éxito de este tour fue igualmente extraordinario.
Otras universidades, al comprobar el éxito artístico y financiero de la aventura de los Fisk Jubilee Singers, decidieron imitarles y crear sus propios coros Góspel polifónicos, desarrollando esta variedad que para la mayoría de la población, constituyó la única fuente de conocimiento sobre la música Góspel durante muchos años.
En 2021 los Fisk Jubilee Singers cumplieron 150 años de vida a lo largo de los cuales han obtenido todos los galardones y el reconocimiento del público y de la industria musical. Son un tesoro histórico que continua entregándonos la maravilla de la música Góspel.
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