Los conjuntos vocales

Una de las consecuencias del extraordinario trabajo que desarrolló Thomas Dorsey con la promoción del Góspel y el desarrollo de los coros, fue la explosión de pequeños conjuntos vocales que vieron una oportunidad en ir a cantar a pequeñas iglesias de las grandes ciudades, o bien, saliendo de las grandes ciudades, actuar en las celebraciones dominicales de las iglesias de pequeñas poblaciones.

Lo cierto es que la existencia de pequeños grupos cantores se remonta a 1905,
cuando la Universidad Fisk decide montar un cuarteto vocal masculino que complemente a su ya famoso coro. El formato fue rápidamente copiado por otras universidades y después en la sociedad con tal éxito, que James Weldon Johnson llegó a afirmar que si te encuentras con 4 chicos u hombres jóvenes de color al azar, tienes el 90% de probabilidades de haberte encontrado con un cuarteto vocal góspel. 

Pero si hay que encontrar un lugar que se pueda definir como el lugar de nacimiento de los conjuntos vocales Góspel, ese es sin duda el estado de Alabama, donde se popularizaron a partir de la Universidad de Tuskegee. Entre otros:

• Los Foster Singers formado por trabajadores de la mina Woodwards Old Mine en torno a R. C. Foster, antiguo alumno de la universidad.
  
  
• Los Birmingham Jubilee Singers, primer conjunto Góspel profesional de la historia.
  
  
• Los Ravizee Singers, quizá el primer conjunto Góspel en incluir mujeres en su formación, al tratarse de miembros de una misma familia.
  

Estos pequeños conjuntos tenían 3 características que los definieron de manera esencial:

Por una parte su tamaño: los grupos consistían en 4 o 5 personas, por la sencilla razón de que ese es el número de personas que caben en un coche. Inicialmente estos conjuntos no podían disponer de más medios que un coche que solían pedir prestado durante el fin de semana. Los conjuntos inicialmente cantaban a capella, aunque muy pronto incorporaron acompañamiento musical aprovechando el piano del que muchas iglesias disponían, o de guitarras, que por su facilidad de transporte se convirtieron pronto en un instrumento de acompañamiento a la música religiosa.

Por otra, sus ingresos: estos conjuntos no cobraban un ingreso fijo por sus actuaciones, sino que recibían lo que los asistentes quisieran entregarles voluntariamente. Como se puede suponer, esto generó un "ranking" de las iglesias en las que estas aportaciones eran más generosas con respecto a las que lo eran menos, provocando una sana competencia entre estos conjuntos, que impulsó la mejora en calidad vocal, en un repertorio más atractivo, y en una interpretación que provocara una mayor atracción en el público.

La tercera, por último, el repertorio. A partir de la aparición del libro "Gospel Pearls" en 1921 que, entre obras de otros autores, incluía algunas de Albert Tindley, Lucie Campbell, algunos arreglos de espirituales por Harry Burleigh y, por supuesto, también de Thomas Dorsey, se convirtió en el corazón del repertorio de todos estos nuevos conjuntos, que pronto pudo ir ampliándose gracias al desarrollo de la industria de la publicación de composiciones que se creó, nuevamente, gracias a Dorsey.

La consecuencia fue que con este impulso primero desde el sur (Alabama) y luego desde el este (Chicago), surgieron innumerables conjuntos vocales a lo largo de todos los EEUU, muchos de los cuales han alcanzado una fama extraordinaria, y de algunos de los cuales hablaremos en las próximas entregas:

• The Dixie Hummingbirds
• The Fairfield Four
• The Five Blind Boys of Alabama
• The Five Blind Boys of Mississippi
• The Golden Gate Quartet
• The Harmonizing Four
• The Sensational Nightingales
• The Soul Stirrers
• The Swan Silvertones
• The Trumpeteers